12 mayo 2007

Si el amor existe

Para aquellos que olvidaron su existencia, se dice que hay una parte de nosotros que muere cuando alguien nos olvida. Pues bien, hagamóslo al revés, que algo viva en nosotros cuando alguien nos quiere cada día un poquito más.

ODA AL AMOR

Amor, hagamos cuentas. A mi edad no es posible engañar o engañarnos. Fui ladrón de caminos, tal vez, no me arrepiento. Un minuto profundo, una magnolia rota por mis dientes y la luz de la luna celestina. Muy bien, pero, el balance? La soledad mantuvo su red entretejida de fríos jazmineros y entonces la que llegó a mis brazos fue la reina rosada de las islas. Amor, con una gota, aunque caiga durante toda y toda la nocturna primavera no se forma el océano y me quedé desnudo, solitario, esperando. Pero, he aquí que aquella que pasó por mis brazos como una ola, aquella que sólo fue un sabor de fruta vespertina, de pronto parpadeó como estrella, ardió como paloma y la encontré en mi piel desenlazándose como la cabellera de una hoguera. Amor, desde aquel día todo fue más sencillo. Obedecí las órdenes que mi olvidado corazón me daba y apreté su cintura y reclamé su boca con todo el poderío de mis besos, como un rey que arrebata con un ejército desesperado una pequeña torre donde crece la azucena salvaje de su infancia. Por eso, Amor, yo creo que enmarañado y duro puede ser tu camino, pero que vuelves de tu cacería y cuando enciendes otra vez el fuego, como el pan en la mesa,así, con sencillez, debe estar lo que amamos. Amor, eso que me diste. Cuando por vez primera ella llegó a mis brazos pasó como las aguas en una despeñada primavera. Hoy la recojo. Son angostas mis manos y pequeñas las cuencas de mis ojos para que ellas reciban su tesoro, la cascada de interminable luz, el hilo de oro, el pan de su fragancia que son sencillamente, Amor, mi vida.

Pongo así el poema, porque parece un relato. Espero que como mínimo haya convencido al cabezota. Un beso a todos.
P.D. Por cierto, el poema es de un chileno muy querido, supongo que no hace falta decir de quién.

37 comentarios:

Shelley dijo...

¿Nadie inicia un debate? Entonces tengo la razón absoluta...

Edmundo V dijo...

La razón absoluta, lo absoluto, es Dios. Nosotros somos finitos y sólo participamos de lo infinito, pensamos a través de Dios, nuestra razón contingente no es más que un momento de la razón absoluta...

Ender el Xenocida dijo...

Sólo si tuviéramos la razón absoluta podríamos afirmar categóricamente que somos finitos. Cómo no la tenemos ni siquiera para afirmar eso, tal vez no seamos finitos, sino que seamos Dios.
Pero si fuéramos Dios, sí tendríamos la razón absoluta, luego sí podríamos afirmar que somos finitos.
Pero si fuéramos finitos, no seríamos Dios...
blablabla...
;-)

Saludos.

Edmundo V dijo...

Si tú fueras infinito no vivirías para la muerte, me hablarías telepáticamente y no por aquí, si tú fueras lo absoluto no hablarías conmigo, no colindarías con nada, no limitarías conmigo, no dependerías de mí ni de nada en ningún sentido, serías ubicuo, omnipotente, todopoderoso, autosuficiente,...

Ender el Xenocida dijo...

Está bien, entonces debo admitir que soy finito. Pero como no soy Dios, esa afirmación no es una razón absoluta. Pot lo tanto, tal vez esté equivocado y sea infinito... y sea Dios...
¿No ves que la lógica aristotélica no sirve para las cuestiones trascendentales?

Txiqui dijo...

Esto me recuerda a aquello que decía Bakunin...
Si Dios existe, debe ser un ser omnipotente y perfecto. Si es omnipotente y perfecto, todas sus acciones y todo lo que haya creado, debe ser perfecto también. Si Dios existe, él nos tiene que haber creado. Por lo tanto, nosotros deberíamos ser perfectos, pero no lo somos, por lo tanto, Dios no existe...

No sé si este debate tiene mucho que ver con la existencia de Dios o no...

Edmundo V dijo...

Ender,

Nuestro razonar finito no es más que un momento de la razón infinita. Dicho de otra manera, lo que tu piensas contingentemente, en tal sitio y a tal hora, no puede más que ser un momento de la totalidad del universo de significados, del universo espiritual, en que transcurre tu existencia mundana.

Dios trascendente se hizo inmanente, carne, a través de Cristo, para volver a ser trascendente. La experiencia de Cristo es la de todo humano, la de la razón finita que no es más que un momento de la razón absoluta, de Dios.

Ivan,

Los teólogos medievales diferenciaban en Dios la potentia absoluta de la potentia ordinata. Si Dios crea al hombre a su imagen y semejanza pero finito es porque no utilizó su potentia absoluta sino la ordinata. Bruno afirmaría que un Dios de esta calaña, un Dios que no pusiera en acto toda su potencia sino una leve fracción de la misma, sería un miserable.

Este debate estaba relacionado con la cuestión de si Dios tiene voluntad (y libre albedrío) o si es necesario, la ley le es inherente. Bajo el primer presupuesto se da explicación de que el mundo creado por él no sea perfecto, así lo quiso él, aunque resulte incomprensible para nosotros.

Anónimo dijo...

Arf, estais como una cabra. Que cansinos con tanta filosofia... Porque no hablais de coches y futbol mo todos los tios de este mundo?

Petunets wapus

Ender el Xenocida dijo...

Ya nos gustaría hablar de fútbol y coches! Pero nos cuesta mucho, no hacemos más que marujear, que si Dios mira lo que ha hecho, que si porqué lo habrá hecho, que si el teólogo aquél dijo aquello, que si Bruno era un tocahuevos...
En el fondo también es prensa rosa, pero camuflada por pseudointelectualillos (me incluyo, evidentemente)
;-)
Cuando vuelvas, hablaremos de tías, como todo el mundo.

Shelley dijo...

¿Estáis colgaos? El debate era sobre la existencia del amor, no sobre Dios o la razón absoluta...

Aiiii, que criaturas...

Un beso :P

Ender el Xenocida dijo...

Por supuesto que existe el amor, es un estado pasajero de enajenación mental muy frecuente entre los seres humanos y algunos primates superiores. Su función es la de asegurar la supervivencia de futuras crías generando un vínculo afectivo entre los progenitores...

Edmundo V dijo...

El amor es sólo cosa de humanos. Un animal no sabe qué es el amor, de hecho no sabe. El amor es mucho más que lo que tu comparas con un estado corporal de un animal. El amor exige el autoreconocimiento de conciencias, los animales carecen de eso, de un mundo simbólico, de significados, de palabras, etc., nada de esto lo tienen los animales. El amor, los amores (porque hay más de un género) sólo son posibles en universos simbólicos. La relación de amor es fundamentalmente simbólica aunque medien, estén ahí, efluvios, carne, instintos, etc.

Es sugerente y muy ilustrado eso de no tomarse demasiado en serio la filosofía, de ironizar acerca de ella, posiblemente ello ayude a filosofar más si cabe, a amar más si cabe del propio pensar.

Ender el Xenocida dijo...

Qué bien! Si es fundamentalmente simbólica, voy a decidir enamorarme de alguien esta misma tarde... y seré feliz!

;-)

Edmundo V dijo...

No. Eso carece de sentido. La causa del deseo, el "objeto a", el cosquilleo que moviliza tu corporeidad (y la del otro), se haya en el inconsciente. El "objeto a" de alguna manera es el nudo gordiano que estructura la totalidad de tu universo simbólico, el que te mueve, el que a un tiempo atraviesa todas tus pasiones, sentires, etc. dotándolas de significado, incorporándolas al mundo.

Insistes reiterativamente en escindir lo simbólico de la carne en el ser humano. En mi opinión, las pasiones pueden llegar a devenir afectos por mediación de la razón y el conocimiento. Asímismo, una misma pasión puede somatizarse de maneras diferentes en personas con ideosincrasias o de ambientes culturales distintos.

Con "fundamentalmente simbólico" quiero decir que en la relación símbolo-carne, sujeto-substancia, el papel activo, primario, el que determina en última instancia, lo tiene el símbolo, el sujeto, mientras que el aspecto pasivo (pasión), secundario, lo tiene la carne, la substancia.

Sólo a un incauto se le ocurriría prescindir del aspecto material, de nuestra corporeidad, de la carne, de los instintos, etc. pero, insisto, ese no es el debate por más que vayas siempre a lo mismo.

Ya te comenté hace unas semanas que Elster tiene un estudio muy interesante a este respecto. En este estudio de Elster, entre otras muchas cosas, se muestra hasta qué punto somos seres culturales, fundamentalmente simbólicos, ejemplificándolo con el ostracismo en la polis griega. El destierro de la ciudad, esto es, del universo simbólico comunitario, de la vida comunitaria con sus significados, suponía el peor de los castigos. El ciudadano griego prefería la muerte al ostracismo. Basta recordar el caso de Sócrates. Así pues, llegamos de nuevo a ese anhelo de reconocimiento de la conciencia del que nos habla Hegel en la Fenomenología del espíritu. Ese anhelo de autoreconocimiento de la identidad propia a través del otro, ese cierre circular en el que el sujeto pone (o no) en juego su propio ser y el ser del otro, sus respectivas identidades dicho de otra manera, es algo estrictamente humano.

Saludos !

Ender el Xenocida dijo...

Ese ejemplo del destierro es justamente el mismo que describe el primatólgo y etólogo Frans de Waal en algunas de sus obras. Entre chimpancés y bonobos (los dos primates más cercanos evolutivamente a nosotros), la expulsión de uno de los miembros del grupo es un castigo más extremo que la pelea directa o el enfrentamiento cuerpo a cuerpo. Sólo se inflige cuando parece haber un consenso general de que ese individuo está poniendo en peligro la calidad de vida del grupo, (de la sociedad, como queramos llamarlo).
La expulsión reduce la esperanza de vida del que es desterrado, y el negarle la necesidad de expresar su empatía con el resto de individuos de su grupo.
Ciertamente, si nos miramos sólo entre nosotros, todo lo que veamos será exclusivamente humano.
Si levantamos un poco la vista veremos que no es así, que aunque somos excepcionales mucho de lo que creíamos exclusividad nuestra se viene dando desde hace millones de años en diversas especies.

Por tanto, la explicación simbólica del hecho es exclusivamente humana, pero no el hecho en sí ni las repercusiones que tiene.

Ei, que yo respeto tu creencia en Hegel, pero mientras tanto, me gusta estudiar los trabajos de los que están ahí fuera, trabajos que por cierto, nunca pudo leer Hegel.

Saludos!

Edmundo V dijo...

El problema no es el desconocimiento respecto a los estudios que hay "ahí fuera" sino la ignorancia respecto a la ideología, las pretensión ingenua de que se está fuera de ella, el creer que ese hace ciencia más allá de unas u otras ideologías. El naturalismo dominante en el mundo científico hoy es sencillamente patético, un reificación de las leyes del mercado proyectada sobre el mundo natural. El sujeto siempre incorpora su propia lógica y ontología sobre el objeto que diría Althusser.

Mi modesta creencia en Hegel y Marx es consecuencia de un periplo crítico. El 99% de los científicos actuales hacen ciencia desde una actitud acrítica respecto a la ideología en que se encuentran inmersos. Bueno y de Hegel, Marx (u otros) bien poco leen, i.e, no van muchos más allá de los tópicos prejuicios y en la mayoría de los casos son unos completos ignorantes respecto a las preguntas por el fundamento del pensar mismo, respecto a las cuestiones de orden filosófico que están en el origen de toda ciencia, etc. Por este motivo, salvo excepciones muy raras como Gay Could (que tampoco es que sea ninguna cosa del otro mundo), simplemente reproducen y proyectan espontáneamente la dinámica propia del mercado y del sistema capitalista al ámbito natural.

La noción misma de NATURAL jamás puede ser neutra. El cientificismo positivista (cada día más en crisis por suerte) no pasa de ser una nueva religión.

Saludos.

Edmundo V dijo...

Respecto al ostracismo.

Tu perspectiva siempre pierde la diferencia, lo específico de lo humano, porque estás obsesionado con buscar la analogía entre lo humano y lo animal.

Claro que lo animal en el ser humano interviene -lo que citas de Waal vaya- pero, por n-ésima vez, nadie negó eso, ¡nadie!, pero hay algo más, y ese algo es que en el ser humano lo corporeo se da en el ámbito de las relaciones mundanas, atravesado por lo simbólico, los significados, el lenguaje, los valores, etc.

Saludos.

Ender el Xenocida dijo...

Es bueno saber que tu postura es el resultado (modesto, eso sí) de un análisis crítico, y que la mía es una postura obsesionada por el naturalismo (entiendo por tanto, que poco reflexiva).

Qué refrescante discutir argumentos contrarios cuando uno le dice explícitamente al otro que los unos son críticos y otros no lo son!
¿Es este un nuevo ejemplo de la dialéctica amo-esclavo de Hegel?

Saludos.

Anónimo dijo...

Empezar por definir ques el amor me pareceria una buena manera de empezar el debate.

¿O es que quereis dar a Shelley la razón absoluta tan facilmente?

Ender, eso de que la función del amor es la "asegurar la supervivencia de futuras crías generando un vínculo afectivo entre los progenitores..." no me covence nada.

Hasta ahí me parecia una buena definición para empezar el debate.

Ender el Xenocida dijo...

Gracias, Tigre de Papel.
Entonces, lo de estado pasajero de enajenación mental sí te ha gustado. Y según tú, ¿a qué se debe la aparición de esos estados? ¿Existe alguna finalidad biológica para que se dispare la feniletilamina (la hormona que induce las sensaciones de estar enamorado)?
[Con ello no pretendo negar la parte conceptual-mental del enamoramiento]

Saludos!

Edmundo V dijo...

Yo comenzaría por discutir si el amor es simbolizable, susceptible de ser aprehendido por el lenguaje... si no lo es nos evitamos el intento de definir algo que de suyo no se presta a tal empresa...

Ender el Xenocida dijo...

Vale, define qué es la simbolización y cual es el proceso mediante el cual simbolizamos para saber si a lo que tú llamas simbolizar es lo mismo que lo que yo hago cuando experimento lo que llamamos amor...


Solo así sabremos si es factible discutir esos conceptos de ese modo.

Edmundo V dijo...

De cara a aclararnos del todo, defíneme que es "definir"...

Ender el Xenocida dijo...

Dices que el amor debe ser simbolizable para poder definirlo, sino no vale la pena discutir.
Yo no sé cuándo algo es simbolizable o no. Intuyo que tú debes saberlo, o tener alguna idea que nos puedas transmitir ya que insistes en la importancia de la simbolización. Deberías definirlo o explicar el proceso de simbolización, tal y como lo entiendes tú para que lo pudiéramos discutir.

Si hay alguien que pueda aportar luz sobre ese tema, (sin tirar pelotas fuera) que lo haga :-)
Si no, otra opción es hablar de datos, medidas, reacciones físicas, sustancias, etc... respecto del amor.

Saludos.

Edmundo V dijo...

Y estoy de acuerdo con definirte que es "simbolizar", pero dado que exiges una definición entonces yo te digo: igual que tu exiges de la definición de "simbolización" para discutir de si el amor es o no simbolizable yo preciso de la definición de definición para poder definirte...

Saludos.

Ender el Xenocida dijo...

... y mientras tanto, Arquímedes, toma la pelota y gol!!!!!! de los griegos!

Ender el Xenocida dijo...

jeje, bueno
definir (más o menos) sería enunciar las propiedades del objeto, de lo que se está hablando.
Iría bien que enunciases las propiedades y características de eso que tú llamas simbolizar: qué cosas son simbolizables y cuáles no, etc... Por ejemplo, el amor es simbolizable. ¿Un ataque de ansiedad lo es? También tiene componentes físicos y mentales.

Me mojo un poco más, y te pongo un ejemplo reflexionando sobre tu posible definición:

Si sólo podemos discutir/estudiar el amor cuando es simbolizable, entonces no hay amor cuando no hay consciencia de él. De modo que cualquier estudio sobre las propiedades físicoquímicas, hormonales, etc... del amor, queda cuanto menos, desvinculado. Una postura como esa, en la medicina, nos haría estudiar los síntomas por un lado y el estado mental por otro, como si fueran debidos a causas diferentes y alejadas. El estudio de enfermedades o estados no utilizaría de cobayas. Por ejemplo, la gastritis, úlceras, diarreas, agotamiento, y demás efectos secundarios del enamoramiento no tendrían explicación si no hay mente consciente que lo simbolice. Sería muy discutible.

Creo que por ahí iría mi refutación a lo de limitar las discusiones a lo que puede o no ser simbolizado.

Saludos.

Edmundo V dijo...

¿Qué es una "propiedad"?
¿Qué es un "objeto"?
¿Qué es una "propiedad de un objeto"?

¿Podrías definirme todo eso?

Ender el Xenocida dijo...

No puedo definirlo todo, pero puedo reflexionar, argumentar, y poner sobre la mesa cuestiones que considero más o menos interesantes. Creo que el último post se entiende bastante bien y da pie a que expongas tus opiniones.
Si no quieres hacerlo, me parece muy bien.
Pero es que las limitaciones a discutir sobre el tema en unos términos concretos -lo de si el amor es simbolizable o no- las has puesto tú.
Creo que deberías hacer un esfuerzo tal y como yo lo he hecho en el anterior post.
¿No crees?

Saludos.

Edmundo V dijo...

Es que sin saber de qué hablamos me resulta difícil. Tú has sido el que has exigido "definiciones". Te lo recuerdo. Yo sólo intento ser coherente con tu proceder, si hay que definir, definamos.

Ender el Xenocida dijo...

Es verdad, te he pedido que expliques qué entiendes tú por simbolización en base a tu frase

Yo comenzaría por discutir si el amor es simbolizable

Ahora, ya no podemos discutir. Ha sido un gran error pedirte esa definición. Lo siento. ¿Ahora me veo obligado a definirlo todo para conseguir que expreses tus opiniones y que discutas sobre el tema?
¿Estoy castigado?

Saludos.

Roser dijo...

Estáis colgaos... Vamos a definir eso si queréis.

;) Un beso

Ender el Xenocida dijo...

Edmundo, si en el futuro me pides que aclare o defina algún concepto en alguna discusión no me comportaré como tú. Puedes estar tranquilo. Y si considero que es absurdo definirlo o que no va a aclarar nada, te lo diré y ya está. Los enroques los dejo para el ajedrez, no para este blog, que se supone dialéctico...

Y si deseas aportar algo sobre el tema del amor, adelante! Esa era la cuestión!

Saludos.

Edmundo V dijo...

Claro.

Si no he continuado escribiendo es porque no he encontrado el momento.

Seguimos pero... ¿por dónde?

Anónimo dijo...

Arf niños, yo hace tiempo que me he perdido.

¿Hace fala hablar tan raro y dar tantísimas vueltas a las cosas?

Petunets

Anónimo dijo...

Según mi punto de vista existen tantas formas de entender el amor como maneras de amar sean posibles.

Y para animar un poco la discusión añadiré:

Creo que en la aparición de esos frecuentes estados pasajeros de enajenación mental a los que llamamos amor (no entro en si son propiamente humanos o también se dan en los primates superios) intervienen factores biologicos, espirituales (o como cada uno les quiera llamar) y evidentemente culturales.

Aparte de eso, no creo que el amor sea único, absoluto ni exclusivo tal y como se tiende a considerar

Ender el Xenocida dijo...

El poema de Shelley se refiere al amor sexual, al enamoramiento con finalidades sexuales, para entendernos (haya o no sexo).
Pero el término Amor tiene muchísimas acepciones, incluído el Amor a la vida, por ejemplo.
Una de las cuestiones aquí es que mentimos constantemente sobre el amor.
Si decimos yo te amo a diferentes personas en diferentes momentos de nuestra vida, es posible que cada uno de esos sentimientos que experimentábamos sean diferentes de los otros. Para nosotros todo es amor, porque abusamos del término... Eso da señales de que englobamos en un mismo concepto (simbolizamos) muchos estados físicos diferentes. Incluso aunque intentemos autoenamorarnos de manera mental, el esfuerzo suele ser vano y el resultado es un autoengaño. Si no hay atracción, al margen de la simbolización, no hay nada que hacer.
Por otro lado, si miramos hacía atrás en nuestra vida amorosa, normalmente (si somos sinceros con nosotros mismos) sabemos de quién estuvimos enamorado y de quién no.
Eso es señal de que sí hay un estado esencial que reconocemos como verdadero amor. Y en mi opinión éste se corresponde con un cuadro fisiológico bastante bien estudiado de hormonas y reacciones químicas.

Saludos!