22 diciembre 2008

No olvidemos a Palestina


Ilan Pappe me acompaña desde hace un tiempo y en estas navidades, a través de su libro Historia de la Palestina Moderna. Un territorio, dos pueblos. En él se vislumbran los grandes crímenes que todavía algunos callan. La aceptación de un Estado colono, el llamado Israel, por parte del mundo entero hace repicar la vergüenza del género humano. A pesar de las tristezas de este libro, lo recomiendo encarecidamente, puesto que Pappe, sin ser historiador, nos transmite la Historia desgarradora de una forma limpia, sincera y documentada, de esa hermosa tierra llamada Palestina.

--PAPPE, Ilan: Historia de la Palestina Moderna. Un territorio, dos pueblos. Ediciones Akal. Madrid, 2007.--

17 diciembre 2008

Un gesto radical



Denuncian agresiones contra periodista que atacó a zapatazos a Bush

MADRID, 16 de diciembre.— Familiares de Muntadher al-Zaydi, el periodista que atacó a zapatazos al presidente George W. Bush, denunciaron hoy que el reportero ha sido víctima de serias agresiones, mientras se extienden las protestas por su liberación, reportó Notimex. Miles de personas salieron por segundo día consecutivo a las calles de Bagdad y otras ciudades de Iraq para exigir la libertad de quien consideran un héroe por enfrentarse a Bush y demostrarle el coraje que se tiene en Iraq contra su invasión de marzo del 2003.

03 diciembre 2008

Ha nacido un nuevo régimen


Os recomiendo Die Welle (La Ola), dirigida por el alemán Dennis Gansel, una impactante película -con impactante final- que da mucho para debatir y reflexionar sobre la Autocracia y los regímenes totalitarios.

El deseo de someterse a un líder o a un grupo de poder puede aflorar por motivos muy diferentes entre los estudiantes del profesor Rainer Wenger, dependiendo de la necesidad y situación de cada uno. El grupo, autocomplacido por el poder de sí mismo sobre los que no forman parte de él, puede cometer acciones que serían impensables desde el punto de vista individual.
Por supuesto, siempre en nombre de las más nobles metas.

Pero, una vez desatado, ¿ni siquiera el propio líder puede controlar a la Ola?

¿De quién nos protegen?

Esto fue lo primero que vio nuestra amiga E. al llegar de Brasil....


Parece que los antidisturbios nos protegen de los obreros de la Nissan pero...

¿no tendrían que protegernos más bien de los empresarios y su sacrosanto sistema que ahora nos lleva a la ruina de la crisis?

¿Algún día cambiará esta imagen y allí donde ahora están los trabajadores estarán empresarios, banqueros, duques, condes y reyes?

18 noviembre 2008

07 octubre 2008

¡ Qué lejos llega el Club !

Para que luego digan que no somos internacionalistas, no hay frontera que se resista al Club...


Una indirecta de parte de todos, para que vuelvas pronto. De lo contrario pondremos fotos comprometidas...

31 agosto 2008

Seminario de introducción a Lenin


A finales de Septiembre comenzamos un nuevo Seminario de introducción a Lenin.

Os adjuntamos el temario, así como las fechas en que se realizarán las sesiones, para que podáis ir organizando las lecturas especificadas en cada uno de los apartados.

Os animamos a participar e invitar a vuestros amigos y compañeros de batalla.

La mayoría de los textos podéis encontrarlos aquí: http://www.marx2mao.com/M2M(SP)/index(sp).html

Por favor, CONFIRMAD VUESTRA ASISTENCIA a clublunallena[at]gmail.com.

Saludos y... ¡a disfrutar con las lecturas!


Seminario de introducción a Lenin
Seminario n.5 del Club de la Luna Llena

La actualidad de Lenin: el marxismo como intervención política
  • Cuatro palabras acerca de Maquiavelo para iniciarse en Lenin;
  • El gesto político leninista por excelencia;
  • Lenin: la cuestión del revisionismo y su actitud respecto de las condiciones objetivas.
nº sesiones: 2
Fechas: 21-09-2008, 28-09-2008

Polémicas entorno al ¿Qué hacer? (1902) y autocrítica en Sobre la reorganización del partido (1905)
  • Lenin y la verdad efectiva;
  • Lenin y la moral: La famosa cuestión de la libertad y otras;
  • La cuestión del partido y del elemento subjetivo;
  • La teoría socialista: ¿interior o exterior a la clase obrera?;
  • II Congreso del POSDR en 1903 y el desierto de 1910: dos experiencias para aprender.
nº sesiones: 2
Fechas: 05-10-2008, 12-10-2008

Situación revolucionaria en La bancarrota de la II Internacional (1915) y la idea central de Imperialismo, fase superior del capitalismo (1916)
  • Estallido de la I Guerra Mundial;
  • Caracterización de una situación revolucionaria;
  • Las contradicciones interimperialistas y la guerra mundial;
  • La teoría del eslabón más débil;
  • Lecciones para hoy.
nº sesiones: 1
Fecha: 26-10-2008

La coyuntura política a través de las Cartas desde lejos (1917) y La enfermedad infantil del "izquierdismo" en el comunismo (1920)
  • De Febrero a Octubre de 1917;
  • ¿Qué quiere decir Lenin con "análisis concreto de la realidad concreta"?;
  • A vueltas con la caracterización de una situación revolucionaria: La famosa "acumulación de circunstancias".
nº sesiones: 1
Fecha: 02-11-2008

Ideas centrales en El Estado y la revolución (1917) y Sobre el Estado (1919).
  • La comuna de París de 1871: ¿mirar al pasado para qué?;
  • La cuestión del Estado y el derecho;
  • La cuestión de la violencia.
nº sesiones: 2
Fechas: 09-11-2008, 23-11-2008

Lenin y la cultura a través de Tareas de las juventudes comunistas (1920) y Cinco años de revolución rusa y perspectivas de la revolución mundial (1922).
  • Palabras crueles a los jóvenes comunistas;
  • La aversión contra los loros que repiten fórmulas;
  • La importancia del estudio de la teoría y la formación integral;
  • Crítica a la actitud estética.
nº sesiones: 1
Fecha: 30-11-2008

18 agosto 2008

La continuidad de los parques

Para los y las cortazistas ;)


Había empezado a leer la novela unos días antes. La abandonó por negocios urgentes, volvió a abrirla cuando regresaba en tren a la finca; se dejaba interesar lentamente por la trama, por el dibujo de los personajes. Esa tarde, después de escribir una carta a su apoderado y discutir con el mayordomo una cuestión de aparcerías, volvió al libro en la tranquilidad del estudio que miraba hacia el parque de los robles. Arrellanado en su sillón favorito, de espaldas a la puerta que lo hubiera molestado como una irritante posibilidad de intrusiones, dejó que su mano izquierda acariciara una y otra vez el terciopelo verde y se puso a leer los últimos capítulos. Su memoria retenía sin esfuerzo los nombres y las imágenes de los protagonistas; la ilusión novelesca lo ganó casi en seguida. Gozaba del placer casi perverso de irse desgajando línea a línea de lo que lo rodeaba, y sentir a la vez que su cabeza descansaba cómodamente en el terciopelo del alto respaldo, que los cigarrillos seguían al alcance de la mano, que más allá de los ventanales danzaba el aire del atardecer bajo los robles. Palabra a palabra, absorbido por la sórdida disyuntiva de los héroes, dejándose ir hacia las imágenes que se concertaban y adquirían color y movimiento, fue testigo del último encuentro en la cabaña del monte. Primero entraba la mujer, recelosa; ahora llegaba el amante, lastimada la cara por el chicotazo de una rama. Admirablemente restañaba ella la sangre con sus besos, pero él rechazaba las caricias, no había venido para repetir las ceremonias de una pasión secreta, protegida por un mundo de hojas secas y senderos furtivos. El puñal se entibiaba contra su pecho, y debajo latía la libertad agazapada. Un diálogo anhelante corría por las páginas como un arroyo de serpientes, y se sentía que todo estaba decidido desde siempre. Hasta esas caricias que enredaban el cuerpo del amante como queriendo retenerlo y disuadirlo, dibujaban abominablemente la figura de otro cuerpo que era necesario destruir. Nada había sido olvidado: coartadas, azares, posibles errores. A partir de esa hora cada instante tenía su empleo minuciosamente atribuido. El doble repaso despiadado se interrumpía apenas para que una mano acariciara una mejilla. Empezaba a anochecer.


Sin mirarse ya, atados rígidamente a la tarea que los esperaba, se separaron en la puerta de la cabaña. Ella debía seguir por la senda que iba al norte. Desde la senda opuesta él se volvió un instante para verla correr con el pelo suelto. Corrió a su vez, parapetándose en los árboles y los setos, hasta distinguir en la bruma malva del crepúsculo la alameda que llevaba a la casa. Los perros no debían ladrar, y no ladraron. El mayordomo no estaría a esa hora, y no estaba. Subió los tres peldaños del porche y entró. Desde la sangre galopando en sus oídos le llegaban las palabras de la mujer: primero una sala azul, después una galería, una escalera alfombrada. En lo alto, dos puertas. Nadie en la primera habitación, nadie en la segunda. La puerta del salón, y entonces el puñal en la mano, la luz de los ventanales, el alto respaldo de un sillón de terciopelo verde, la cabeza del hombre en el sillón leyendo una novela.

Julio Cortázar, La Continuidad de los Parques (Final del juego, 1956)

22 julio 2008

¿Por qué socialismo?

Autor: Albert Einstein
Primera Edición: En Monthly Review, Nueva York, mayo de 1949.

¿Debe quién no es un experto en cuestiones económicas y sociales opinar sobre el socialismo? Por una serie de razones creo que si.

Permítasenos primero considerar la cuestión desde el punto de vista del conocimiento científico. Puede parecer que no hay diferencias metodológicas esenciales entre la astronomía y la economía: los científicos en ambos campos procuran descubrir leyes de aceptabilidad general para un grupo circunscrito de fenómenos para hacer la interconexión de estos fenómenos tan claramente comprensible como sea posible. Pero en realidad estas diferencias metodológicas existen. El descubrimiento de leyes generales en el campo de la economía es difícil por que la observación de fenómenos económicos es afectada a menudo por muchos factores que son difícilmente evaluables por separado. Además, la experiencia que se ha acumulado desde el principio del llamado período civilizado de la historia humana --como es bien sabido-- ha sido influida y limitada en gran parte por causas que no son de ninguna manera exclusivamente económicas en su origen. Por ejemplo, la mayoría de los grandes estados de la historia debieron su existencia a la conquista. Los pueblos conquistadores se establecieron, legal y económicamente, como la clase privilegiada del país conquistado. Se aseguraron para sí mismos el monopolio de la propiedad de la tierra y designaron un sacerdocio de entre sus propias filas. Los sacerdotes, con el control de la educación, hicieron de la división de la sociedad en clases una institución permanente y crearon un sistema de valores por el cual la gente estaba a partir de entonces, en gran medida de forma inconsciente, dirigida en su comportamiento social.

Pero la tradición histórica es, como se dice, de ayer; en ninguna parte hemos superado realmente lo que Thorstein Veblen llamó "la fase depredadora" del desarrollo humano. Los hechos económicos observables pertenecen a esa fase e incluso las leyes que podemos derivar de ellos no son aplicables a otras fases. Puesto que el verdadero propósito del socialismo es precisamente superar y avanzar más allá de la fase depredadora del desarrollo humano, la ciencia económica en su estado actual puede arrojar poca luz sobre la sociedad socialista del futuro.

En segundo lugar, el socialismo está guiado hacia un fin ético-social. La ciencia, sin embargo, no puede establecer fines e, incluso menos, inculcarlos en los seres humanos; la ciencia puede proveer los medios con los que lograr ciertos fines. Pero los fines por si mismos son concebidos por personas con altos ideales éticos y --si estos fines no son endebles, sino vitales y vigorosos-- son adoptados y llevados adelante por muchos seres humanos quienes, de forma semi-inconsciente, determinan la evolución lenta de la sociedad.

Por estas razones, no debemos sobrestimar la ciencia y los métodos científicos cuando se trata de problemas humanos; y no debemos asumir que los expertos son los únicos que tienen derecho a expresarse en las cuestiones que afectan a la organización de la sociedad. Muchas voces han afirmado desde hace tiempo que la sociedad humana está pasando por una crisis, que su estabilidad ha sido gravemente dañada. Es característico de tal situación que los individuos se sienten indiferentes o incluso hostiles hacia el grupo, pequeño o grande, al que pertenecen. Como ilustración, déjenme recordar aquí una experiencia personal. Discutí recientemente con un hombre inteligente y bien dispuesto la amenaza de otra guerra, que en mi opinión pondría en peligro seriamente la existencia de la humanidad, y subrayé que solamente una organización supranacional ofrecería protección frente a ese peligro. Frente a eso mi visitante, muy calmado y tranquilo, me dijo: "¿porqué se opone usted tan profundamente a la desaparición de la raza humana?"

Estoy seguro que hace tan sólo un siglo nadie habría hecho tan ligeramente una declaración de esta clase. Es la declaración de un hombre que se ha esforzado inútilmente en lograr un equilibrio interior y que tiene más o menos perdida la esperanza de conseguirlo. Es la expresión de la soledad dolorosa y del aislamiento que mucha gente está sufriendo en la actualidad. ¿Cuál es la causa? ¿Hay una salida?

Es fácil plantear estas preguntas, pero difícil contestarlas con seguridad. Debo intentarlo, sin embargo, lo mejor que pueda, aunque soy muy consciente del hecho de que nuestros sentimientos y esfuerzos son a menudo contradictorios y obscuros y que no pueden expresarse en fórmulas fáciles y simples.

El hombre es, a la vez, un ser solitario y un ser social. Como ser solitario, procura proteger su propia existencia y la de los que estén más cercanos a él, para satisfacer sus deseos personales, y para desarrollar sus capacidades naturales. Como ser social, intenta ganar el reconocimiento y el afecto de sus compañeros humanos, para compartir sus placeres, para confortarlos en sus dolores, y para mejorar sus condiciones de vida. Solamente la existencia de éstos diferentes, y frecuentemente contradictorios objetivos por el carácter especial del hombre, y su combinación específica determina el grado con el cual un individuo puede alcanzar un equilibrio interno y puede contribuir al bienestar de la sociedad. Es muy posible que la fuerza relativa de estas dos pulsiones esté, en lo fundamental, fijada hereditariamente. Pero la personalidad que finalmente emerge está determinada en gran parte por el ambiente en el cual un hombre se encuentra durante su desarrollo, por la estructura de la sociedad en la que crece, por la tradición de esa sociedad, y por su valoración de los tipos particulares de comportamiento. El concepto abstracto "sociedad" significa para el ser humano individual la suma total de sus relaciones directas e indirectas con sus contemporáneos y con todas las personas de generaciones anteriores. El individuo puede pensar, sentirse, esforzarse, y trabajar por si mismo; pero él depende tanto de la sociedad -en su existencia física, intelectual, y emocional- que es imposible concebirlo, o entenderlo, fuera del marco de la sociedad. Es la "sociedad" la que provee al hombre de alimento, hogar, herramientas de trabajo, lenguaje, formas de pensamiento, y la mayoría del contenido de su pensamiento; su vida es posible por el trabajo y las realizaciones de los muchos millones en el pasado y en el presente que se ocultan detrás de la pequeña palabra "sociedad".

Es evidente, por lo tanto, que la dependencia del individuo de la sociedad es un hecho que no puede ser suprimido -- exactamente como en el caso de las hormigas y de las abejas. Sin embargo, mientras que la vida de las hormigas y de las abejas está fijada con rigidez en el más pequeño detalle, los instintos hereditarios, el patrón social y las correlaciones de los seres humanos son muy susceptibles de cambio. La memoria, la capacidad de hacer combinaciones, el regalo de la comunicación oral ha hecho posible progresos entre los seres humanos que son dictados por necesidades biológicas. Tales progresos se manifiestan en tradiciones, instituciones, y organizaciones; en la literatura; en las realizaciones científicas e ingenieriles; en las obras de arte. Esto explica que, en cierto sentido, el hombre puede influir en su vida y que puede jugar un papel en este proceso el pensamiento consciente y los deseos.

El hombre adquiere en el nacimiento, de forma hereditaria, una constitución biológica que debemos considerar fija e inalterable, incluyendo los impulsos naturales que son característicos de la especie humana. Además, durante su vida, adquiere una constitución cultural que adopta de la sociedad con la comunicación y a través de muchas otras clases de influencia. Es esta constitución cultural la que, con el paso del tiempo, puede cambiar y la que determina en un grado muy importante la relación entre el individuo y la sociedad como la antropología moderna nos ha enseñado, con la investigación comparativa de las llamadas culturas primitivas, que el comportamiento social de seres humanos puede diferenciar grandemente, dependiendo de patrones culturales que prevalecen y de los tipos de organización que predominan en la sociedad. Es en esto en lo que los que se están esforzando en mejorar la suerte del hombre pueden basar sus esperanzas: los seres humanos no están condenados, por su constitución biológica, a aniquilarse o a estar a la merced de un destino cruel, infligido por ellos mismos.

Si nos preguntamos cómo la estructura de la sociedad y de la actitud cultural del hombre deben ser cambiadas para hacer la vida humana tan satisfactoria como sea posible, debemos ser constantemente conscientes del hecho de que hay ciertas condiciones que no podemos modificar. Como mencioné antes, la naturaleza biológica del hombre es, para todos los efectos prácticos, inmodificable. Además, los progresos tecnológicos y demográficos de los últimos siglos han creado condiciones que están aquí para quedarse. En poblaciones relativamente densas asentadas con bienes que son imprescindibles para su existencia continuada, una división del trabajo extrema y un aparato altamente productivo son absolutamente necesarios. Los tiempos -- que, mirando hacia atrás, parecen tan idílicos -- en los que individuos o grupos relativamente pequeños podían ser totalmente autosuficientes se han ido para siempre. Es sólo una leve exageración decir que la humanidad ahora constituye incluso una comunidad planetaria de producción y consumo.

Ahora he alcanzado el punto donde puedo indicar brevemente lo que para mí constituye la esencia de la crisis de nuestro tiempo. Se refiere a la relación del individuo con la sociedad. El individuo es más consciente que nunca de su dependencia de sociedad. Pero él no ve la dependencia como un hecho positivo, como un lazo orgánico, como una fuerza protectora, sino como algo que amenaza sus derechos naturales, o incluso su existencia económica. Por otra parte, su posición en la sociedad es tal que sus pulsiones egoístas se están acentuando constantemente, mientras que sus pulsiones sociales, que son por naturaleza más débiles, se deterioran progresivamente. Todos los seres humanos, cualquiera que sea su posición en la sociedad, están sufriendo este proceso de deterioro. Los presos a sabiendas de su propio egoísmo, se sienten inseguros, solos, y privados del disfrute ingenuo, simple, y sencillo de la vida. El hombre sólo puede encontrar sentido a su vida, corta y arriesgada como es, dedicándose a la sociedad.

La anarquía económica de la sociedad capitalista tal como existe hoy es, en mi opinión, la verdadera fuente del mal. Vemos ante nosotros a una comunidad enorme de productores que se están esforzando incesantemente privándose de los frutos de su trabajo colectivo -- no por la fuerza, sino en general en conformidad fiel con reglas legalmente establecidas. A este respecto, es importante señalar que los medios de producción --es decir, la capacidad productiva entera que es necesaria para producir bienes de consumo tanto como capital adicional-- puede legalmente ser, y en su mayor parte es, propiedad privada de particulares.

En aras de la simplicidad, en la discusión que sigue llamaré "trabajadores" a todos los que no compartan la propiedad de los medios de producción -- aunque esto no corresponda al uso habitual del término. Los propietarios de los medios de producción están en posición de comprar la fuerza de trabajo del trabajador. Usando los medios de producción, el trabajador produce nuevos bienes que se convierten en propiedad del capitalista. El punto esencial en este proceso es la relación entre lo que produce el trabajador y lo que le es pagado, ambos medidos en valor real. En cuanto que el contrato de trabajo es "libre", lo que el trabajador recibe está determinado no por el valor real de los bienes que produce, sino por sus necesidades mínimas y por la demanda de los capitalistas de fuerza de trabajo en relación con el número de trabajadores compitiendo por trabajar. Es importante entender que incluso en teoría el salario del trabajador no está determinado por el valor de su producto.

El capital privado tiende a concentrarse en pocas manos, en parte debido a la competencia entre los capitalistas, y en parte porque el desarrollo tecnológico y el aumento de la división del trabajo animan la formación de unidades de producción más grandes a expensas de las más pequeñas. El resultado de este proceso es una oligarquía del capital privado cuyo enorme poder no se puede controlar con eficacia incluso en una sociedad organizada políticamente de forma democrática. Esto es así porque los miembros de los cuerpos legislativos son seleccionados por los partidos políticos, financiados en gran parte o influidos de otra manera por los capitalistas privados quienes, para todos los propósitos prácticos, separan al electorado de la legislatura. La consecuencia es que los representantes del pueblo de hecho no protegen suficientemente los intereses de los grupos no privilegiados de la población. Por otra parte, bajo las condiciones existentes, los capitalistas privados inevitablemente controlan, directamente o indirectamente, las fuentes principales de información (prensa, radio, educación). Es así extremadamente difícil, y de hecho en la mayoría de los casos absolutamente imposible, para el ciudadano individual obtener conclusiones objetivas y hacer un uso inteligente de sus derechos políticos.

La situación que prevalece en una economía basada en la propiedad privada del capital está así caracterizada en lo principal: primero, los medios de la producción (capital) son poseídos de forma privada y los propietarios disponen de ellos como lo consideran oportuno; en segundo lugar, el contrato de trabajo es libre. Por supuesto, no existe una sociedad capitalista pura en este sentido. En particular, debe notarse que los trabajadores, a través de luchas políticas largas y amargas, han tenido éxito en asegurar una forma algo mejorada de "contrato de trabajo libre" para ciertas categorías de trabajadores. Pero tomada en su conjunto, la economía actual no se diferencia mucho de capitalismo "puro". La producción está orientada hacia el beneficio, no hacia el uso. No está garantizado que todos los que tienen capacidad y quieran trabajar puedan encontrar empleo; existe casi siempre un "ejército de parados". El trabajador está constantemente atemorizado con perder su trabajo. Desde que parados y trabajadores mal pagados no proporcionan un mercado rentable, la producción de los bienes de consumo está restringida, y la consecuencia es una gran privación. El progreso tecnológico produce con frecuencia más desempleo en vez de facilitar la carga del trabajo para todos. La motivación del beneficio, conjuntamente con la competencia entre capitalistas, es responsable de una inestabilidad en la acumulación y en la utilización del capital que conduce a depresiones cada vez más severas. La competencia ilimitada conduce a un desperdicio enorme de trabajo, y a ése amputar la conciencia social de los individuos que mencioné antes.

Considero esta mutilación de los individuos el peor mal del capitalismo. Nuestro sistema educativo entero sufre de este mal. Se inculca una actitud competitiva exagerada al estudiante, que es entrenado para adorar el éxito codicioso como preparación para su carrera futura.

Estoy convencido de que hay solamente un camino para eliminar estos graves males, el establecimiento de una economía socialista, acompañado por un sistema educativo orientado hacia metas sociales. En una economía así, los medios de producción son poseídos por la sociedad y utilizados de una forma planificada. Una economía planificada que ajuste la producción a las necesidades de la comunidad, distribuiría el trabajo a realizar entre todos los capacitados para trabajar y garantizaría un sustento a cada hombre, mujer, y niño. La educación del individuo, además de promover sus propias capacidades naturales, procuraría desarrollar en él un sentido de la responsabilidad para sus compañeros-hombres en lugar de la glorificación del poder y del éxito que se da en nuestra sociedad actual.

Sin embargo, es necesario recordar que una economía planificada no es todavía socialismo. Una economía planificada puede estar acompañada de la completa esclavitud del individuo. La realización del socialismo requiere solucionar algunos problemas sociopolíticos extremadamente difíciles: ¿cómo es posible, con una centralización de gran envergadura del poder político y económico, evitar que la burocracia llegue a ser todopoderosa y arrogante? ¿Cómo pueden estar protegidos los derechos del individuo y cómo asegurar un contrapeso democrático al poder de la burocracia?

11 julio 2008

Serotonina, oxitocina, y el amor engañoso

Si esa noche, por lo que sea, tus niveles de testosterona se encuentran más elevados de lo normal, tu apetito sexual se verá incrementado. Seguro que estarás más predispuest@ a encontrar alguna aventura amorosa. Pero si no tienes éxito tranquil@ que no te vas a quedar ansios@. La testosterona sube y baja rápidamente sin mayores repercusiones, y al día siguiente todo empieza de cero otra vez.

En caso de que sí hayas tenido sexo satisfactorio con alguien, habrás notado el subidón de la dopamina, la hormona del placer. Si realmente ha sido bueno te habrá gustado tanto que querrás repetirlo a casi toda costa. ¡Pero que la dopamina no te engañe! en el fondo a ella le da igual si vuelves con la misma pareja o no; incluso te permite sentirte enamorad@ de dos personas a la vez. De acuerdo, de acuerdo… si ha estado tan bien, quizás hayan bajado un poco los niveles de serotonina, te sentirás desorientad@ y pensarás que esa persona es especial, tiene “algo”. Empezarás a enamorarte.

Quizás tras varios chutes de dopamina notes cierta sensación de adicción. Puedes relajarte y disfrutarlo tranquil@, en este estadio la testosterona y la dopamina no forman parte relevante de la historia. Desdecirse no sería traumático todavía. Lo serio de verdad llega cuando la oxitocina aparece en escena. Tu cerebro la segrega a grandes cantidades en cada orgasmo, y es la responsable del sentimiento de apego, de unirte definitivamente a tu nuev@ compañer@. Si hubiera una hormona del amor, esta sería la oxitocina. Cuando estáis juntos os reduce el estrés, el miedo, aumenta la confianza, la generosidad, la sensación de bienestar en cada abrazo… es la esencia química del afecto. Y lo más importante: hace que te sientas feliz cuando observas a tu pareja feliz. Su satisfacción pasa a ser más importante que la tuya propia. Ahora sí que puedes decir honestamente “te quiero”, en lugar del “te deseo” propio de la etapa dominada por la dopamina.

De todas formas no te confíes. Asegúrate de mantener los niveles de oxitocina altos a base de orgasmos, porque si no, pueden ir decreciendo hasta perder el apego. Si esto os ocurriera a los dos a la vez, tampoco sería tan grave. La tristeza de la separación daría paso rápidamente a una sensación de alivio. Lo peligroso, desdichado, insano, funesto, devastador…, es cuando por cualquiera de los miles motivos diferentes que existen, la relación se rompe cuando los niveles de oxitocina están al máximo. Entonces la química cerebral se vuelve loca. La serotonina baja por los suelos: te deprime, te desespera, pierdes la cordura, dudas constantemente de lo correcto e incorrecto, aparece la ansiedad, la obsesión…

Te separas y de repente tus neuronas encargadas del placer ya no segregan nada de dopamina. Notas un síndrome de abstinencia brutal. Tu cerebro pide a gritos sinápticos volverle a ver. No deberías hacerlo; es un suicidio hormonalmente hablando. Recaerás como el alcohólico que en el momento de más debilidad piensa “será sólo una copa”. Dale tiempo a tu química cerebral para que restablezca sus niveles normales. Además, allí ya no hay amor verdadero ni nada. Bueno, quizás sí lo hay, pero queda ofuscado por el deseo egoísta de sentirte mejor, de aliviar tu propio sufrimiento. En esos momentos no estás pensando en qué es lo mejor para él o ella.

“Quiero continuar siento tu amig@” puede decir el que haya salido más ileso de la desdichada ruptura. Científicamente absurdo. Es como si pretendes curar al alcohólico de antes diciéndole: “Debes dejar de beber. Pero puedes continuar yendo a los mismos bares, no hace falta que tires las botellas de tu casa, y dale un inocente beso al vino cada cierto tiempo”. Los neurocientíficos expertos en adicción saben que eso no lleva a ningún sitio. Si les hiciéramos caso, la terapia del desamor incluiría borrar teléfonos, mails, y tirar fotos a la basura, por muy doloroso que sea.

La neurociencia dice que esto es muy por encima lo que le ocurre a un cerebro enamorado. Nunca lo aceptaríamos como justificación de nuestra situación individual, porque hay demasiadas excepciones y casos particulares que se escapan a la lógica química. Pero de todas formas nos lo creemos. No molesta en absoluto que la ciencia nos de su versión acerca de qué pasa. Lo patético llega cuando pretende averiguar el por qué pasa…

Por Pere Estupinyà, extraído de su excelente blog:

Apuntes científicos desde el MIT

10 julio 2008

La Mente De Piedra

Hogen, un maestro Zen chino, vivia solo en un pequeño templo en el campo. Un dia, cuatro monjes peregrinos llegaron y le pidieron permiso para hacer un fuego en el patio para calentarse.

Mientras construian un fuego, Hogen les oyo hablar acerca de la subjetividad y la objetividad. Se les unio y dijo: "Supon que hay una piedra muy grande, ¿la cosideras que esta fuera o dentro de tu mente?".

Uno de los monjes le contesto: "Desde el punto de vista del Budismo todo es una representacion mental, asi que yo diria que esta dentro de mi mente."

"Debes de sentir tu cabeza muy pesada," observo Hogen, "si vas por ahi cargando con una piedra como esa en tu mente."

25 junio 2008

Relato del naufragio de quién siempre está enamorado

Esta historia no cuenta nada que no sepa el mundo. Si alguien la lee es porque la hace suya en todos los sentidos de la vida. Espero que a cada cuál le guste.


Que no me abandone... esta suerte incesante de estar siempre en el limbo, aunque no quiera decir nada el limbo, aunque sean fantasías tuyas. Por favor, que no me abandone, este ir y venir de los vaivenes eternos, porque sin ser lo que soy, no podría estar enamorado de ti. Y miento si te digo que algún día dejaré de estarlo. ¡Es tan ilógico todo...!

¿Puedo quererte y con eso conformarme?¿Puedo odiar a Bécquer por iluso?¿Y respetar que nunca sepa si tú algún día me has querido? Sí... sí puedo. Porque mi vida está llena de amores tempranos, nacidos en épocas tardías de las conciencias que me han acompañado en este viaje.

Yo te quiero, lo sé, pero no puedo continuar muriendo en cada esquina por algo que dicen que existe. Sí, el amor anda suelto y yo lo cojo sin querer al vuelo. Y tú andas distraída, pensando en más allá del océano. ¿Qué puedo hacer?

Vivo de eso. Para enamorarme de ti he tenido que hacer ganchillo en mis pensamientos y decirle a mis oídos que no escucharan tu voz de Sirena. No soy trovador para pensar que eres una bruja que me está enfermando por doquier a dónde vayas. No he querido quererte y sin embargo aquí estoy... contemplándote desde lejos.

Voy errante y de sobra en este camino. Porque la soledad participa gratis. Te amo y lloro a cada instante que recuerdo que no soy la parte que te corresponde. Silenciar podría este sentimiento.

Pero si la existencia que he concebido de la mía propia se pudriera en el anonimato, me aterraría pensar que jamás nadie vaya a comprender el sentimiento que tu misma existencia otorga en este naufragio.

07 junio 2008

Sonata d´Isabel de Vicent Andrés Estellés

He aixecat, mentre escrivia, el cap
i amb ulls cansats de la cal·ligrafia
he vist enllà, damunt d'una tauleta
que hi ha al racó del nostre menjador,
entre papers i llibres que m'estime,
com un ocell de ritme popular,
com un gresol, una fotografia
de fa mil anys o de fa quatre dies:
tu i jo, Isabel, feliços d'un amor,
i més enllà les Sitges del meu poble.
La veig sovint i et recorde moltíssim,
el cos esvelt, com un cànter de Nàquera
i un breu ocell de tristesa als teus ulls.
M'ha ajudat molt, de nit, mentre escrivia
entre papers i fortuïtes síl·labes.
Com qui, a la nit, intenta orientar-se
amb mans, amb ulls, jo t'evoque i et mire
aquell instant de l'any 48.
Tu vares fer que cregués altre cop
i m'has donat la teua companyia,
el teu discret silenci, el teu ajut.
Aquesta nit t'he mirat novament.
Et tinc i et veig com et veié el meu cor
el dia aquell de la fotografia.
Dorms, ara, al llit, i dormen els teus fills.
En aquest gran silenci de la casa
jo et vull deixar, amant, amats per sempre,
un ram convuls de síl·labes de vidre.
Al dematí potser et floriran
entre les mans de timidesa invicta,
i volaran des d'ell brisa i colomes.
Creix el mural de calç i de coets,
amb claredats i explosions de mar,
per un amor que se´ns enduu plegats.
Secret amor, estendard lluminós,
barres de sang sobre un blanc intocable,
aquest amor salvatge d'un país
que havem creuat, estimant-nos moltíssim,
des d'Alacant a Castelló, amb els ulls
plens d'una llum, una gota de llum.
Dic el teu nom en aquest punt mateix.
Dic Isabel i canten els canyars
i pels carrers diversos de València
passen amants que es besen a la boca,
amb molt d'amor presos per la cintura,
atarantats d'una olor de gesmils.
Dic el teu nom i amb casta reverència
el posaré en un pitxer amb aigua.
Dic Isabel i seguesc el camí.

21 mayo 2008

Despedida nº 527

A Iván Martos, para que se la cante a quien deba...

Hay millones de cosas que yo nunca te he dicho
para no parecer a tus ojos idiota;
si bien no me importó quedar en entredicho,
no es correcto irme así, sin dejarte una nota.

Anduve largo tiempo buscando tristemente
tu mirada furtiva cayendo sobre mí
y mientras acechaba, oculto entre la gente,
me miraron algunas, de las otras que vi.

Las desdeñé tan pronto me indujiste un suspiro;
a las demás señales dije siempre que no;
quise que me miraras como yo ahora te miro:
con los ojos que llegan donde no llego yo.

Quise decirte ven, escapemos del ruido
de tu vida y la mía, y del resto del mundo,
pero, al ir a llamarte, cometí algún descuido
y relegué mi voz a un silencio profundo.

He sido una Penélope anhelando quimeras,
esclava de un engaño: hilando por el día
cien frases escogidas para que me quisieras
que, por la noche, otros, deshilan todavía,

un Tántalo famélico del que huye la comida
(que todo cuanto ansío se aleja de mi mano),
un Sísifo esquelético que hipotecó su vida
cargando eternamente con tu belleza en vano.

He sido cuanto he sido y, a pesar de mí mismo,
consigo pocas veces truncar la realidad
en este juego antiguo de sombras y espejismos
que no he sabido nunca perder con dignidad.

Menos por lo que he escrito, más por lo que he callado,
me retiro sin ruido; como vine, me voy;
te olvidarás que he sido tu loco enamorado,
que es así como algunos llaman a esto que soy.

Quizá sabré, exiliado, distinguir el sonido
que entre las voces tiene la palabra oportuna
o, como aquel poeta del que tanto he aprendido,
escuchar solamente, entre las voces, una.

El poeta cuántico. 20-05-08.

18 mayo 2008

El plátano resucitado

Como bien dejó entrever nuestro amigo Ivan, sí hubo una historia de un plátano que resucitó, no al tercer día... pero bueno. Está fue su historia, quien la quiera entender que la entienda quien no que siga en su desazón.


Lloraba en cualquier parte de su cuerpo, en los labios, en el pelo, en las manos. Los ojos sólo restaban impasibles a las circunstancias. Yo no lo sabía, pero sí me quería de verdad y el amor es algo tan sutil, tan guardado e íntimo que uno se estima más dejar de creer en la cordura que no restar bajo el absoluto desconcierto de la vida. Yo, aunque no me creáis, no lo sabía.

A mí me mataron muchas veces. A veces sólo eran heridas profundas pero otras veces eran muertes. Mi corazón latía pero mi mente moría. Sólo el suelo frio del pasillo y mi cara pegada a él intentaban devolverme la vida. Luego el agua en la bañera, fría, impávida a las circunstancias, intentaba devolverme la vida. Y si volvía en sí era por qué sí, por qué sí.

La carne, la astúcia, la sin razón tenían cabida en la persona que quise y en la que no quise. No tuve paciencia, no la tuve. Había demasiado esperpento en mi vida para tener paciencia, no quise esperar más. Era esta la oportunidad que me devolvían, que me debían, no sé qué o no sé quién, pero me daban un nuevo comienzo para volver a caminar, las circunstancias eran ignorantes de lo ocurrido antaño y seguían derribando muros para construirlos de nuevo.

Mi espiral no tenía fin... Un plátano como yo, que puede decir de las circunstancias. Debía morir simbólicamente, porque ella no me quería, no creía que me quisiera por el resto de los años de mi finita vida, aunque el espiral no tuviera fin. Y allí fue cuando me desangré de desilusión y mis ojos no lloraron por mí ni por ella, lloraron por el dolor, por el dolor que no nace de la vida sino de la misma muerte.

La tormenta despertó. Me siguió mientras yo la seguía. Me gritó mientras yo la escuchaba, me suplicó mientras yo lamentaba y me regaló un libro mientras yo resucitaba.

No fue al tercer día, no. He aprendido que con el tiempo los plátanos no nos morimos del todo, siempre nos quedan unas circunstancias que abren las puertas del oxígeno y ni la lejía, ni el agua fría, ni el hielo del suelo pueden compararse con esa paralela que uno crea a parte de su espiral.


24 abril 2008

Aniversario de la muerte de nuestro amigo

Amigos, amigas y gente de toda índole,

Hoy hace justamente un año (mirar noticia) del suicidio de nuestro amigo aplatanado, ahorcado en su regreso al Castillo de If.


(Días después lo obligaron a resucitar, pero eso ya es otra historia, no?)


13 abril 2008

Vivir sin mí

En mi corazón se desclavaron las espinas de Calamaro. Hace ya un año que se desclavaron y siempre surgen las contradicciones. Los muros, la piedra, el metal. ¿De qué están hechos los daños?

Hoy quisiera llorar por más tiempo, ahogarme en mi propio llanto, sentir que la muerte me roza los párpados. Y sin embargo escribo por las paredes en blanco, frego el suelo con aroma de pino, me enjuago las manos en lejía y grito al gato si cruza la puerta de salida.

Hace ya algún tiempo se desnudó el dolor entrando la primavera. Me dijo No, no voy venir y allí supe que lo roto jamás se vuelve a empezar. Mis amigos no habían sido mis amigos, mi familia era la familia de otro, mis únicos recuerdos eran falsos, estúpidos, irreales. Todo mi mundo se venía abajo. Y ahora mismo sé que ha desaparecido.

He tratado de esconderme por mucho tiempo y eso no vale. No vale para olvidar, para seguir adelante, no es cuestión de aquí me quedo, no. No quiero estar más así. La otra parte de mí se esfumó en algún humo impestuoso de esos que mueren en los incendios. Sólo puedo dejar de esperar a la soledad.

No me voy a engañar más. Yo pensé que había merecido la pena todo. Los errores se pagan. Los desamores se pagan. Los amigos se pagan. Las esperanzas se pagan. Los rencores se pagan. Los malentendidos se pagan. Y la desilusión.... ¡madre mía! la desilusión.... se p e r p e t u a.

Ya no sé si vivo sin mí, realmente.

04 abril 2008

Física, Filosofía y el Proceso de Bolonia

En el número de Abril de Investigación y Ciencia podemos encontrar una entrevista de M. Springer a A. Zeilinger. Zeilinger es decano en la Universidad de Viena, ha realizado avances importantes en la teleportación cuántica y conseguido crear interferencias entre moléculas. Es una autoridad en materia de Física Cuántica aplicada. Casualmente, el entrevistador, licenciado en física, estudió en la misma Universidad que él y comentan sobre el tema:

Springer:
En nuestra época de estudiantes en la Universidad de Viena, la física estaba todavía en la facultad de filosofía y teníamos que pasar un examen de filosofía.

Zeilinger: ¡Cómo no! Además, en aquella época el plan de estudios era muy abierto. Considero infantil la organización académica de las universidades actuales, por culpa del Proceso de Bolonia. Se mira con lupa cualquier vicisitud, si se ha asistido a tres horas o a cuatro de mecánica cuántica. Es totalmente irrelevante. En mi carrera no asistí ni a una sola hora de clase de mecánica cuántica. La aprendí yo solo con libros, en aquellos tiempos aún no existía Wikipedia, ¡por suerte!, porque los libros son mejores. Pero en el examen oral del doctorado le había dicho con anterioridad al examinador: "examíneme de mecánica cuántica, quiero aprenderla".

24 marzo 2008

Seminario de Introducción a El Capital


El Club de la Luna Llena tal y como prometió vuelve con un Seminario de Introducción a El Capital. Si la historia tiene muchas paradojas una de ellas, que algún día habrá que ser considerada en su justa medida, es como pudo ser (y como puede ser) que la obra más importante de Marx, a la que dedicó un esfuerzo ingente, esto es, El Capital, haya sido su obra más olvidada y menos leída por los propios "marxistas". Quizá ya podemos encontrar un preludio de este enigmático hecho en las palabras de Marx cuando afirmaba que lo que había recaudado con la edición y venta del primer tomo de El Capital a penas le había costeado los cigarillos que había fumado mientras la escribía.

El seminario comenzará a partir del domingo 6 de abril a las 11h30min.

El temario del seminario, una muy sucinta aproximación para animar la lectura de la obra, será el siguiente:


Introducción a El Capital

Seminario n.4 del Club de la Luna Llena

  • El proceso de producción y el concepto de modo de producción.

    El modo de producción como estructura.

    Los elementos del proceso de producción: objeto del trabajo, instrumento de trabajo y producto del trabajo.

    Fuerzas de producción y relaciones sociales de producción. La ley de correspondencia, vicisitudes.

    Los tres niveles del modo de producción: económico (estructura), jurídico-político y ideológico (superestructura).


  • La dialéctica de la mercancía.

    El doble carácter de la mercancía: Valor de uso y valor.

    La preponderancia del valor sobre el valor de uso en el capitalismo. Cosificación.

    La universalización del intercambio de equivalentes.

    El fetiche de la mercancía.


  • El concepto de plusvalía.

    ¿Qué es la plusvalía? ¿Qué es la cuota de plusvalía?

    Una mercancía que siendo mercancía no es como el resto de mercancías: la fuerza de trabajo.

    ¿Dónde se origina la plusvalía?¿Dónde funciona la ley del valor y donde no funciona la ley del valor?


  • ¿Qué es el capital?

    Ciclo del capital y reproducción ampliada del capital.

    Capital variable y capital constante.

    La tasa de ganancia (lo que importa al capitalista) y cuota de plusvalía (lo que importa al obrero).

    La composición orgánica del capital.

    Aumento de la composición orgánica del capital y tendencia decreciente de la tasa de ganancia.


  • El pecado original inconfeso del capitalismo: La acumulación originaria.

11 marzo 2008

El canto del hombre apasionado

Aquí os dejo un pequeño regalo de un poeta de los llamados "metafísicos". ¿Si es un canto a la melancolía no es un hombre apasionado?






Huid, vanos deleites,
breves como la noche

en que vuestra locura se consume.
Nada es dulce en la vida,
¡fuera el hombre discreto para verlo!,

sino tú, ¡oh dulcísima, suave melancolía!
Bien hayan los cruzados
brazos, los ojos fijos, la mirada
a la que mortifica penetrar los objetos,
la vista hincada en tierra,
la lengua encadenada, sin acento.

Manantiales y sotos sin veredas,
lugares que prefiere la pálida pasión,
paseos bajo el rayo de la luna,
a la hora en que las aves
se han recogido todas en su tibio cobijo,
y quedan sólo búhos y murciélagos.
En medio de la noche la campana,
un gemido de adiós, son los sonidos
que nutren nuestro espíritu.
Y luego descansamos nuestros huesos
en un sombrío, silencioso valle.
No hay nada más delicadamente suave
que la amable, sutil melancolía.


JOHN FLETCHER (1579-1625), la traducción es de Blanca y Maurice Molho.

25 febrero 2008

Viajero del tiempo

El individuo denominado Miguel S., boliviano de finales del XX, aparece a la izquierda de esta fotografía tomada en 1923 en México y que puede encontrarse en la pared de un restaurante mexicano egarense de reciente apertura. Sin duda, es la prueba de que se trata del mismo hombre y que viajó por el tiempo. También existe la posibilidad de que el otro individuo, que está brindando con una jarra de leche, pudiera ser el inventor de la nave espaciotemporal. Esta hipotética nave podría utilizar esa leche como combustible, y la fotografía sería el documento gráfico que da la pista al viajero, en caso de sufrir pérdida de memoria o daños psicológicos.

Miguel S. habría viajado desde el espaciotiempo del méxico postrevolucionario al de la España de principios del siglo XXI. Y lo habría hecho a toda leche, con la misión de extender la revolución a todos los rincones del mundo, espaciotemporalmente hablando...

En estos momentos, el viajero se encuentra entre nosotros, es escurridizo y utiliza una jerga extraña. Pero no se dejen engañar: con toda seguridad, guarda el secreto de los viajes en el tiempo.

29 enero 2008

Las máquinas del tiempo, de H.G. Wells a los agujeros negros.

El Club de Luna Llena vuelve al ataque con un nuevo Seminario. Esta vez no nos va a ocupar la cuestión de la Ideología a través de Hitchcock, tampoco El capital de Marx por el momento, sino el sueño anhelado por generaciones y generaciones de personas de ingenio de intentar entender y dominar el tiempo. Pensar el tiempo, ese va a ser el objetivo de este nuevo Seminario de los lunáticos.

La temática será la siguiente:

Título: Las máquinas del tiempo, de H.G. Wells a los agujeros negros.
Seminario n.3

1. Introducción: ¿Viajar a cuándo?
  • Viajes en el tiempo en película y novelas: descripciones generales.
  • Declaración de intenciones.
2. Tiempo y espacio: ¿un amor correspondido?
  • Tiempo, espacio y movimiento: un trío misterioso.
  • Filosofía y ciencia del tiempo y el espacio a lo largo de la historia (Destacados: Lao-Tze, Zenón, Aristóteles, Galileo, Newton, Descartes, Kant, Materialismo histórico, 2ª Ley de la Termodinámica, los Cuánticos, Einstein, Bergson...)
  • Ciencia del tiempo: psicológico, termodinámico y relativo al movimiento (relativista)
3. Un poco de física
  • Cómo definir el tiempo sin definirlo: SIMULTANEIDAD RELATIVISTA.
  • En la Relatividad no todo es relativo.
  • Los diagramas de vida y el reloj de arena.
  • ¿La IRREVERSIBILIDAD termodinámica en cuestión?
  • Predicción estelar: Agujeros negros.
4. Límites al viaje en el tiempo
  • Límites filosóficos. ¿los hay?
  • Límites relativistas (RE y RG).
  • Límites termodinámicos.
  • Límites Cuánticos.
  • Películas:, Viaje al futuro (1, 2 y 3), Supermán 1, Contact. Descripción y diagramas de vida
  • Novelas: La máquina del tiempo (H. G. Wells), El fin de la eternidad (Isaac Asimov) y La saga de Ender (Orson Scott Card). Descripción y diagramas de vida
5. Bricomanía: "Receta casera de una máquina del tiempo"

Las sesiones como hasta ahora se realizarán los domingos a partir de las 11h30min, tendrán una duración de hora y media, sin contar el descanso.

Tenemos pensado realizar dos sesiones los días:
17 y 24 de Febrero.

Si estáis interesados o necesitáis más información escribidnos a clublunallena@gmail.com, necesitamos saber el número de participantes que habrá.

¡ Os animamos a participar !

25 enero 2008

¿Podemos conocer la Verdad?


¿Puede la filosofía dar respuesta sobre lo que es verdadero?

¿Es la matemática la única verdad demostrable?

¿Lo verdadero es demostrable?

¿Cuál es el crimen perfecto?

De lo que no podemos saber, es mejor callar.

07 enero 2008

De las vueltas que da la tuerca...

Para la respuesta de los que dudan entre sueños y "realidad"



Voy a decir algo breve, algo que al decirlo se borre en vuestra memoria. Lo hago así para que nadie pueda recriminarme que no soy la voz del pueblo. Voy a decirlo ahora, todo termina allá. Si esa no era la respuesta que buscabas, vete. No huyas en dirección contraria pues a los que nunca te van a ir a buscar les desagradará que vuelvas con ellos. Yo te lo digo para que te des cuenta de lo que significas. Quédate acá. Donde los sueños los inventamos en un bar sucio de Ca n'Anglada. Aquí, en el lugar del ahora que jamás fue como el de ayer. Fíjate en los demás, nos perdimos cien mil veces y cien mil veces volvimos a comenzar. Yo fuí poeta de nadie y el amor me surgió cuando dejé de buscar. No vuelvas allá. Amigo mío, estamos pendientes de tu felicidad. Hoy y mañana. Y yo no puedo pensar que le haces una visita diaria a la tristeza y le hablas de la mala suerte que tuviste. No sé, es mejor quedarse acá. No tengo dinero, es verdad, pero en mi mesa está Gabriel mirándome y me acuerdo de su andar al garete y me río si no sé si mañana es pasado de un futuro inmediato. No tengo palabra, tienes razón, pero si no se puede vivir de los sueños, si no podemos guardar aire en una botella de cristal o coger agua con las manos, si por ahí se nos escapa el aliento, los años, la vida. Si no hay imaginación de la imaginación. La tuerca ya no girará.