19 febrero 2010

Deseos de óptica amorosa

Mírame, no escatimes dioptrías;
focalízame y vuelve al infinito
de las miradas frías.

4 comentarios:

Txiqui dijo...

Y no escatimes versos y escribas poemas tan cortos! ;)

Ender el Xenocida dijo...

Cuando sobran las palabras...

Ender el Xenocida dijo...

Mírame entre soledades
porque es la soledad lo que me toca:
que tus ojos desmientan con verdades
los constantes engaños de mi boca.

Mírame, no escondas nada
que pueda malgastarte todavía,
la noche está habituada a sus cerrojos,
la oscuridad se cierne sin tus ojos
y es el amanecer una utopía.

Mírame, no escatimes dioptrías;
focalízame y vuelve al infinito
de las miradas frías.
Si no es así, no admito
ninguna excusa más que, por mi parte,
justifique el peligro de mirarte.

Mírame con violencia
y engarzaré tus ojos en un broche
de luminosa esencia
antes que la ilusión vuelva a apagarse,
que hay miradas que se abren a la noche
como si nunca fueran a cerrarse.

Mírame y no creerás que esté tan loco:
es mi oficio robarte la mirada
que con los ojos toco,
aunque no mucho, un poco,
apenas algo, nada.


A petición de Iván y Anna, supervivientes de este blog naufragado.
epc.

anna dijo...

sí, está muy bien tu poesía